Este Ridículo Estudio Intenta Demostrar que las Terapia de Conversión Funcionan
Los grupos anti-gays están presumiendo de un «nuevo» estudio que demuestra que la llamada terapia de conversión realmente funciona. Solo hay cuatro problemas con este estudio: (1) Está basado en datos antiguos de 2011, (2) su metodología defectuosa no prueba nada, (3) dos de sus principales autores son un psicólogo no certificado y un «semi-científico retirado» y (4) fue publicado en una revista con el objetivo de defender la fe católica. Buen intento, amigos.
El estudio ex gay, llamado «Efectos de la terapia en hombres religiosos que tienen atracción del mismo sexo no deseada«, se publicó en la edición de julio de The Linacre Quarterly, y grupos anti-gay como The Liberty Counsel y Family Research Council dicen que este estudio demuestra que la terapia de conversión puede ser «beneficiosa y efectiva» para cambiar la orientación sexual de uno.
El estudio encuestó a 125 hombres que habían pasado por «esfuerzos de cambio de orientación sexual», preguntándoles si pensaban que les ayudó a ser menos homosexuales. Pero los hombres pasaron por diferentes formas, y al final de solo 28 de ellos se sentían «mayoritariamente» o «exclusivamente» heterosexuales. Dicho de otra manera, el 76% de los hombres aún se sienten atraídos predominantemente por los hombres.
La encuesta también reveló los extraños métodos ex gay a los que fueron sometidos estos hombres, incluyendo no masturbarse, hacer «ejercicio neutral» (es decir, poner su energía sexual en algo «neutral» como correr en lugar de algo «femenino» como clases de baile y jazz), usar «aversión encubierta» (un nombre elegante para «imaginarse teniendo VIH»), fortalecimiento espiritual (estudio de la Biblia) y básicamente «reformulación del deseo» sobre «sustitutos heterosexuales» (dirigiendo el mismo deseo sexual a las mujeres).
Zack Ford, un escritor para el sitio político progresivo Think Progress, examinó de cerca este estudio y señaló que sus autores principales Paul Santero y Dolores Ballesteros tienen doctorados de psicología de un seminario católico no certificado por la Asociación Americana de Psicología (uno entre numerosos grupos profesionales de psicólogos que llaman a la terapia una forma de tortura psicológica). Un tercer autor del estudio, Neil Whitehead, es un científico de la tierra autoproclamado sin título de psicología. Los tres tienen carreras de larga data que se benefician de la terapia ex-gay.
El estudio fue publicado en The Linacre Quarterly, una publicación propiedad de la Catholic Medical Association, cuya misión específica es «defender los principios de la fe católica en la ciencia y la práctica de la medicina» y que considera que la homosexualidad tiene «efectos de desintegración personal».
Tal vez lo más revelador sea que casi el 90% de los hombres encuestados en este estudio se identificaron como cristianos que practican activamente, una pista de por qué estaban en terapia, para empezar. Cuando tu religión te dice que eres una abominación pecaminosa, satánica y que molesta a los niños, es posible que quieras cambiar en lugar de quemarte en el infierno.
Pero no dejes que este estudio te engañe. 14 estados de Estados Unidos han prohibido la terapia de conversión catalogándola como dañina, y los grupos anti-LGBT ahora están llamando a esas prohibiciones «Debo seguir siendo Gay». Están apuntalando este nuevo estudio como prueba de que puedes cambiar.
Tal vez deberían ver una encuesta de 2013 en la que el 84% de los ex sobrevivientes gay dijeron que les dejó una vergüenza duradera y daño emocional.
